Tener una buena visibilidad a la hora de conducir es imprescindible para poder conducir de forma segura en cualquier situación. Para conseguir la mejor visibilidad es necesario que los limpiaparabrisas funcionen perfectamente. Estos son los encargados de mantener limpio y con la mejor visibilidad el parabrisas del coche frente a las diferentes adversidades climatológicas y ante la suciedad que se acumula en el parabrisas.
El sistema limpiaparabrisas
El sistema limpiaparabrisas consiste en un conjunto de elementos que sirven para poder mejorar la visibilidad del parabrisas durante la conducción. Este está compuesto por las siguientes partes:
- Escobillas: Son unas tiras hechas de goma que se colocan en los brazos móviles. Están en contacto directo con el parabrisas y se desplazan sobre él para retirar el agua acumulada en el mismo.
- Brazos móviles: Están fabricados normalmente de metal y se encargan de sujetar la escobilla, asegurando que esta mantenga una presión equilibrada sobre el cristal.
- Motor reductor: Un pequeño componente que combina un reductor de velocidad y un motor eléctrico. Se sitúa bajo el capó. Es el encargado de mover y controlar la velocidad a la que se mueven los brazos móviles a la hora de ponerse en funcionamiento.
- Bomba centrífuga o de depósito: Consiste en una pequeña máquina hidráulica que suministra el líquido limpiaparabrisas hasta los eyectores de agua, que expulsan el líquido al parabrisas.
Cambio de limpiaparabrisas
En cuanto al cambio del limpiaparabrisas, las únicas piezas que se deben reemplazar de manera regular son las escobillas. El resto, al no ser piezas de desgaste, no será necesario cambiarlas hasta que se observen roturas o desperfectos en ellas. Sin embargo las escobillas sí que se desgastan por diversos factores y esto obliga a tener que cambiarlas con cierta regularidad. Se recomienda realiza el cambio cada 6 meses o cada año, pero los intervalos pueden variar dependiendo de factores que pueden hacer que las escobillas se desgasten de manera prematura. El frío, el sol o el uso intensivo pueden hacer que las escobillas se gasten más de lo debido.
Los pasos a seguir para realizar el cambio de las escobillas son los siguientes:
- Comprar las escobillas adecuadas y de buena calidad: A la hora de comprar las escobillas hay que asegurarse de que estas son compatibles con el vehículo. Al ser un elemento tan importante para la seguridad, es importante comprar unas escobillas que garanticen un buen funcionamiento.
- Levantar el brazo móvil: Así es más cómodo trabajar sobre él.
- Extraer la escobilla antigua: En algunos casos es necesario retirar un embellecedor para poder acceder a una pestaña que permite liberar la escobilla. En otros casos, solamente hará falta apretar un botón.
- Instalar la nueva escobilla: Se trata de realizar el proceso anterior de manera inversa. Probablemente se escuche un “clic” al colocarla bien.
- Proceder a instalar la otra escobilla: El cambio se debe hacer por parejas para asegurar la mejor visibilidad en todo el parabrisas.
- Comprobar el buen funcionamiento de las escobillas: Es necesario comprobar su instalación antes de salir a la carretera para evitar accidentes.
